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El calor asfixiante que invade Madrid en verano (la AEMET marca máximas de 38 grados) obliga a residentes y turistas a coger el bikini y trasladarse a algunos de los rincones cercanos más refrescantes. Aunque la playa quede lejos para darse un baño diario, existen otras opciones en mitad de la naturaleza y solo están a media hora en coche de la capital.
1. Playa del Alberche (Aldea del Fresno): baño tranquilo y picnic en familia
A solo 54 minutos del centro, si el tráfico lo permite, la llamada playa del Alberche nace de la unión de los ríos Alberche y Perales, creando una amplia zona de baño con aguas tranquilas y rodeada de vegetación. Además, cuenta con áreas habilitadas para picnic, mesas, bancos y zonas de sombra natural.
Llegar es sencillo: hay que tomar la carretera M-507 en dirección a Aldea del Fresno, y una vez en la localidad, seguir las indicaciones hasta la zona recreativa.
2. Embalse de San Juan: la conocida como 'playa de Madrid'
Se trata de un pantano artificial de más de 14 kilómetros navegables, por lo que es ideal para dar un paseo en barco o ir en kayak. Eso sí, con mucha precaución. El embalse de San Juan o de San Martín de Valdeiglesias también dispone de playitas donde el chapuzón está asegurado: la de Virgen de la Nueva (con bandera azul) o la del Muro.
El acceso más habitual es por la autovía M-501, pasando por Pelayos de la Presa o San Martín de Valdeiglesias; hay zonas destinada al estacionamiento cerca de las playas (mejor madrugar para no quedarse sin plaza).
3. Las Presillas: pozas naturales para combatir el calor
El área de las Presillas es una zona de río con tres pozas en las que está permitido ese ansiado baño veraniego. Según del barrio de Madrid desde el que salgas, la distancia es de solo una hora (o un poco más si hay atasco).
Está en el Valle del Lozoya, junto al Monasterio de El Paular, y es ideal para hacer un picnic: tiene césped y unas vistas preciosas al Pico Peñalara. La entrada es gratuita, no hay aforo y el pago del aparcamiento es de 9 euros para los turismos y 3 euros para las motocicletas.
4. La Boca del Asno, las piscinas naturales de Segovia a una hora de Madrid
Esta área recreativa está situada en el municipio de Real Sitio de San Ildefonso (Segovia). en plena Sierra de Guadarrama. Se encuentra junto al río Eresma en los Montes de Valsaín y ayuda a superar el calor recorriendo el curso del río, gracias a sus pozas naturales y una vegetación y fauna que invita a prestar atención a los detalles.
No hay que perderse la garganta con las Marmitas de Gigante del Río Eresma (hay zonas habilitadas para el baño) o los Baños de Venus, una poza con un pequeño salto de agua en el Arroyo Telégrafo. Para llegar hasta dicha área desde el centro de la metrópoli, hay que coger la A6 (autovía de La Coruña) en dirección al Puerto de Navacerrada y continuar por la CL601 hacia La Granja de San Ildefonso/Valsaín.
5. La playa de Estremera, piscinas naturales imprescindibles en verano
También conocida como la playa de Los Villares, esta se encuentra a unos 70 kilómetros del centro de la ciudad. Aunque no es una laguna como tal (se trata de una zona de baño fluvial sobre el río Tajo), sí que forma parte de las pocas zonas de baño oficialmente autorizadas por la Comunidad de Madrid.
La playa de Estremera incluye merenderos, papeleras, parque infantil, kiosco, alquiler de sombrillas y ducha. Esto no le resta ni un ápice de naturalidad al entorno, plagado de chopos, vegetación, y césped. También se pueden practicar divertidas actividades en familia.